PRESUNTA CHORIZA , POLITICA PRESUNTA

"Detrás de un mentiroso hay siempre un ladrón."

James L. White en RAY (2004)

No sé a vosotros, a mi esta foto me hace daño. Una persona que se ha pasado seis meses en prisión y sale por las puertas de los juzgados como una estrella de cine tiene algo de incoherente. No digo yo que salga llorando y dándose golpes en el pecho, pero entiendo más la actitud de la ex alcaldesa, con gafas oscuras, sin sus mechas, y con varios años más en su rostro. Claro que no tienen las dos el mismo rostro. La rubia, como decía Gil, se ha quitado varios kilos de encima y se los ha echado todos en la cara. Ella argumenta que es inocente. Vale. La inocencia no tiene nada que ver con la alegría.

Me asquea oírla autodenominarse presa política. No, querida. No eres una presa política, eres una política presa. Que no es lo mismo. Y presa por choricear, presuntamente, no por tus ideas políticas. Un insulto a todos aquellos que en nuestro pasado, y en el presente de otros lugares del mundo, fueron encarcelados por pensar distinto que el dictador aposentado en el sillón del poder. Hay gente que es culpable solo por cómo se defiende. Y tú hueles a culpabilidad porque si esa es la defensa que esgrimes, la inocencia hace tiempo que huyó con el argumento con que nos agredes.

Te metieron en la trena, rubia, porque el juez consideró que hay indicios suficientes para considerar que te has enriquecido ilícitamente. Porque, querida, tener cincuenta millones de pelas en casa, debajo del colchón, huelen más a gato muerto que a agua de Channel. Te he oído justificar ese dinero como procedente de los regalos de tu reciente boda. Que suerte la tuya. Acudieron invitados más generosos que los que se reunieron en la boda de la hija de El Padrino. Espero que al menos los canapés y la ternera asada que les sirvieras fueran de altura.

Y me jode más cuando ahora justificas la posesión de esa pasta gansa porque “eres universitaria y tienes un par de masters”. Estoy seguro que la universidad por la que has pasado no expende títulos firmados por el Rey y que los masters pertenecen a materias no legisladas por nuestro sistema educativo. Eso, o yo equivoqué la carrera... Cualquiera que haya pasado por una de las facultades de nuestro país sabe que nada tiene que ver un título con el hecho de guardar trescientos mil euros bajo un ladrillo de la cocina. Y si hay jóvenes que se lo creen, te haré culpable de la futura masificacion de la universidad española. Demuestras así que, como los malos políticos, vives aislada de la realidad. Todos sabemos que un fontanero, hoy día, gana más dinero que el número uno de cualquier promoción. Pero claro, tú no te ves con el mono y, lo que es más, no quieres que nadie te pueda imaginar así vestida. Tú eres la “Channel” como te han apodado en el trullo.

Rubia, no has perdido en estos meses ni el tinte ni la vergüenza. Pero intentaré seguir confiando en la justicia y que pierdas pronto la sonrisa. Una sonrisa que nos llama idiotas, estúpidos, borregos y que amenaza con convertirse en carcajada. Carcajada que estoy seguro que pronto veré. Una carcajada franca, falsa, perlada, en uno de esos programas que ya se te disputan para que vengas a contarnos cualquiera de esas milongas de persecución política que sufres y que has estado preparando minuciosamente entre los muros de Alhaurín de la Torre.

Sólo deseo que se te aparezca el fantasma de Gil todas las noches y que, en lugar de cadenas, escuches eso de “Ruuuuubia... Choriiiiiiiiza”, como una eterna letanía que no te deje dormir... y que el supuesto dinero que te has llevado supuestamente te lo gastes en un supuesto psiquiatra que te quite tus supuestos complejos de culpa.

Ah, y después escribe un libro. O plágialo. En los días que corren, es lo mismo.


"Esto no va a poder conmigo. Tengo firmes convicciones..."
Isabel García Marcos.

"El dinero es la más firme de las convicciones...
Nunca decepciona porque siempre da lo que promete"
David Gistau.